viernes, 3 de octubre de 2025

El salmo CXXXIII

 

Comparezco hoy ante vosotros para compartir una reflexión sobre uno de los textos bíblicos de mayor fuerza simbólica dentro de la masonería: el Salmo 133.

Dice: “Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía.”

Estas palabras resuenan en nuestra Orden como un llamado permanente a vivir la verdadera fraternidad. La logia no es un espacio para rivalidades ni discordias, sino un templo espiritual en el que cada piedra, por distinta que sea, encuentra su lugar en la construcción común. La armonía entre los hermanos es el cimiento sobre el cual se levanta la obra masónica.



“Es como el buen óleo sobre la cabeza, el cual desciende sobre la barba, la barba de Aarón, y baja hasta el borde de sus vestiduras.”

El óleo consagrado representa la sabiduría y la luz que descienden desde lo alto. Así también en nuestra logia, la armonía que nace de la unidad fraternal fluye desde los principios más elevados, la verdad, la justicia y el amor fraternal y se derrama sobre cada uno de nosotros, impregnando nuestra conducta masónica y profana.



 “Es como el rocío del Hermón, que desciende sobre los montes de Sion; porque allí envía Jehová bendición, y vida eterna.”




El rocío, que vivifica la tierra reseca, simboliza la bendición que el Gran Arquitecto del Universo concede a la logia cuando sus miembros trabajan en concordia. Allí donde los masones se reúnen en espíritu de fraternidad, allí también desciende la bendición y se asegura la trascendencia de nuestra obra, que va más allá de nuestras vidas individuales.

Hermanos míos, el Salmo 133 nos recuerda que la masonería no se sostiene en el brillo de una sola piedra, sino en el concierto armónico de todas ellas. Cada uno de nosotros está llamado a contribuir a esa armonía, con tolerancia, humildad y respeto mutuo, para que nuestro taller sea siempre digno de la presencia del Gran Arquitecto del Universo.

Concluyo invitando a cada uno a guardar en su corazón estas palabras:
“Cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía.”

Es todo, Venerable Maestro, queridos y apreciados Hermanos.

Con todo mi sentimiento Fraternal

Alessandro Robinson Rodriguez Cobeñas

Aprendiz de la B:. R:. L:. S:. Delfos N° 3